Hasta Siempre!

A los pies de un verano que intenta marcharse me derrumbo una vez mas ante las palabras que recorren mis pensamientos.

Voy a abandonar.
Mis pensamientos no van a ser plasmados nunca más en el lugar donde tantas lágrimas derramé.
Y la razón... La razón no es otra que el dolor que hacerlo me ha causado.
Reviví en muchas ocasiones, solo desahogándome en un rincón donde nadie antes me veía... pero ahora es como ponerse a llorar en mitad de la calle.
Ya no tengo intimidad para contar mis cosas.
Ahora mis pensamientos causan dolor.
Mis incertidumbres derrumbaron alguna que otra muralla...
Digamos que las palabras que mis envenenados dedos escribieron me han hecho la vida aún más difícil...
Y como todos los que leyeron alguna vez este diario, comprenderán que no es precisamente lo que necesito.

Ya era la oveja negra, y ahora, por culpa de mis sentimientos, lo soy aún más.
Pero no me importa lo que puedan pensar algunas personas.
Lo que he dicho, lo que he pensado, lo que he hecho, lo que amo, a quien amo, de quien recelo o de quien no... ES MI VIDA. Y solo es mía.
Por todo eso voy a seguir luchando, así me cueste llorar lágrimas de sangre.
Quiero ser feliz, y se que algún día lo conseguiré.

Guerras mayores se han ganado... Y yo solo quiero ganar la mía. Con sus derrotas correspondientes, pero algún día espero sonreír sin el peso del pasado.

Me quedo con muchas cosas que contar, con muchas emociones que compartir...
Pero me siento tan cohibido... que ya no puedo derramarme en estas páginas.

Páginas que no cerraré nunca, por si algún día no puedo resistir las ganas de gritar. Aunque espero que ese día no llegue nunca, y solucionar todos y cada uno de los problemas que abarcan mi vida.

MIL GRACIAS a todas las personas que de algun que otro modo estuvieron aquí brindándome un hombro en el que apoyarme, o simplemente dedicándo unas palabras de apoyo incondicional.

Tan solo por leer...
Tan solo por comprender...
Gracias a todas esas personas que lloraron a mi lado en aquellos momentos en los que respirar se hacía dificil...

GRACIAS!!!
HASTA SIEMPRE!

Incierto futuro, lejano pasado...

La incertidumbre del futuro no me deja expresar el miedo que siento...
Las cadenas llenas de veneno que inundan mi vida diaria no me dejan seguir...
No se si es por mí o por todo lo que me rodea por lo que no logro dejar escapar estas letras que tanto me ayudaron a vaciar mi alma de dolor.

Lo que tengo claro es que no me olvido del lugar donde tantas lágrimas derramé...

Mi situación actual no es mucho mejor desde que nos vimos la última vez.
Familiarmente hablando todo es un torbellino de palabras confusas y sentimientos contrariados enormemente destrozados. Nada tiene sentido sin la verdad por delante.
Duelen mucho las bofetadas, pero más duelen las palabras... Aunque se que algunos pensarán que más valen dos bofetadas a tiempo...

Tengo miedo al ocaso del verano.
Tengo miedo a perder la poca felicidad que siento cada día al despertar, porque por poca que sea la que siento, me inunda cada amanecer.
Dicen que cuando tienes poco, lo valoras como si fuese lo que más. Y ahora se lo que es valorar lo escaso...

Me pongo a pensar, como suelo acostumbrar, y me doy cuenta de que lo he perdido todo...
He perdido todo mi pasado por arriesgar un nuevo futuro.

Espero que el Otoño me traiga el anhelo de todo cuanto deseé.

Diario escaparate

Normalmente, antes de depositar aquí las palabras que me traen, las ordeno en mi cabeza mientras enciendo un cigarro, y contamino mi podrida vida, una vez mas.
Esta noche no me hace falta encender ningún cigarro para, mientras tanto, ordenar las letras que voy a escribir.
Llevo casi dos semanas con unas ganas locas de desahogarme, aquí, en mi Diario. Le pese a quien le pese. Lo lea quien lo lea...

Mi vida gira, como supongo lo harán todas las vidas de todos los ojos que me leen. Pero mi vida se ha tornado algo más complicada de lo que era, pues ya no tengo ni el apoyo ni la confianza de la familia.

He vuelto a fallar.
Me he vuelto a equivocar.

Y como de costumbre, he hecho daño a las personas que quiero.

A veces las palabras pueden hacer daño, mucho daño. Y en varios de mis arrebatos nocturnos llegue a causar ese dolor con palabras vomitadas desde el odio del momento, desde el más puro sentimiento del dolor que sentía en esos instantes...
Cosas que se piensan y se dicen, aunque a la mañana siguiente ya quisieras haberte cortado la lengua, o en este caso los dedos...

Y eso ocurrió aquí, en este invento desbocado, sin pies ni cabeza. Creado desde el más puro sentimiento tan solo para desahogar todo aquello que nunca me atrevería a decir. Pero ahora se que he metido la pata... La he metido hasta el fondo.
Aquellas palabras envenenadas de rencor que escribí han calado hondo donde nunca jamás debían haber llegado.

El problema es que ya es tarde. El daño ya es irreversible.
Estoy tan envenenado que he contagiado con mi veneno a las personas que mas me querían y que al mismo tiempo más me odiaban por ser como soy...
Y no se como pedir perdón...
El daño que he hecho es más grande que el arrepentimiento.

No voy a contar como me siento, porque hay veces que no es necesario... Cualquiera que me conozca lo más mínimo sabe como estoy. Por muy falso que haya podido parecer.

No aspiro a recuperar nada de lo que he perdido, solo quiero comprensión. Y recordar que perfectos no somos nadie, aunque algunos si que lo son más que otros. Pero todos tenemos nuestros fallos, mas pequeños o más grandes, pero todos los tenemos.
Y daño también hacemos todos, solo que cuando es a la cara duele más.

Todos tenemos un diario. Escrito o simplemente pensado. Pero todos opinamos.
El dolor llega cuando ese diario es compartido.

Pero ahora vivo dentro del temible escaparate. Y tengo que aguantar sin anestesia los ataques. Aguantaré lo que me echen pues así llegué a nacer.

Dicen por ahí que aquí habla hasta el enterrador. Que a los muertos les pita el oído después del adiós, que no hay forma para que descansen.

Dicen por ahí que yo he sido canalla anteayer y mañana también lo seré con quien tire y me de, y se ponga la venda al instante...



Quien tiene un por qué para vivir puede soportar cualquier cómo.

Reunificación de problemas

En esta noche de verano anticipado las lágrimas me sorprenden una vez más.
Se adueñan de mi cara sin querer, resbalan casi sin darme cuenta... sin pedir el adecuado permiso para salir.
Así sin más...

Tengo el cerebro cocido de tanto pensar...
Las ilusiones están agotadas de tanto usarse...
Y el terrorífico ruido del silencio vuelve a mi hogar, un domingo más...

El sabor de una semana hermosa aún me acompaña, aun sabiendo que el dolor será mas fuerte mañana.
Y es que ya no se si me ahogo por este estúpido polen que lo inunda todo, o por la ansiedad que me petrifica el alma.

Últimamente me dedicaba a vivir, como siempre... Rezagado en ilusiones o esperanzas a que todo pase, de la forma más agradable posible.
Pero ya no hay esperanzas...
Ya no hay ilusiones...

Ahora recuerdo con nostalgia cuando solo me preocupaba el amor...
Que sencillo parece desde este momento que los único problemas que me abordaran fuesen por amor...

Los bancos se me echan encima, y ninguno de ellos puede ayudarme...
No se si he malgastado, derrochado o simplemente gastado más de la cuenta...
Solo se que llevo ya casi dos años con menos de lo justo, y este barco se hunde.
Solo queda un tripulante... y no logro encontrar un puerto seguro donde atracar.
No veo la solución a mis problemas.
Esta vez no consigo hallarla...

Doy gracias al menos de tener aún un techo bajo el que dormir, aunque no se por cuanto tiempo.
Doy gracias por conservar un puesto de trabajo, de sueldo bajo, pero gratificante cuando llegan los primeros días de cada mes. Aunque no vea un mísero euro pasar por mi mano, pues los bancos se lo llevan todo.

Ojala pudiese volver el tiempo atrás y hacer las cosas de otra forma.
De una forma más sensata.
Pero da igual arrepentirse ahora... pues siempre están ahí esas personas que te recuerdan cada día los fallos que has cometido. Una y otra vez, sin descanso.

No se como, pero tengo que salir de esto... Y en el fondo hay algo que me dice que lo voy a conseguir. Solo espero no equivocarme.
El próximo martes obtendré una respuesta bancaria muy importante, quizá la solución a muchos de mis problemas. O quizás el apocalipsis de todos ellos...

De momento no puedo hacer nada, solo esperar que llegue ese día.

Después retomaré mi camino, siempre hacia adelante.

Tarde...

Tengo tantas cosas que decir, que mis dedos no son capaces de descubrir lo que mis dedos quieren expresar.
He llegado al punto en el que me da absolutamente igual lo que mis palabras puedan llegar a decir.

El cúmulo es tan grande que no puedo explicarlo. Necesito estar solo.
Solo como siempre lo he estado.
Con esa amiga abandonada llamada Soledad.

Porque me pregunto día a día de que me sirve luchar. Si cada paso que arriesgo, o cada paso que doy seguro no sirve de nada...
Sigo siendo el mismo... La misma persona insignificante a la que todo el mudno deja de lado... La misma persona... El mismo de simpre... El que no tiene nada divertido que aportar a los demas..
El que aburre con su problemas...
El que intenta dar pena con sus historias...

Ha llegado el punto en el que paso hasta de mí.




Me da igual todo!!!!!!!!!!!!!!!!



Y lo peor de todo es que no tengo un puto cigarro que echarme a la boca, y ya hasta fumo estos putos cigarros de vainilla...
Porque esta crisis me esta dejando sin nada...

En que mal día regresé de aquel Oviedo desnudo... En que mal día decidí crecer...
Mi alma se ha quedado pequeña y mi cuerpo sigue creciendo....

Como puedo parar este sentimiento que cada día me mata más?

Soy escalvo de una vida que no quiero vivir...
Soy vagabundo de unos sentimientos tardemente encontrados...

No quiero vivir así...

Por favor si existe un dios que me lo quite todo y me de la oportunidad de volver a nacer con esta cabeza...


Por favor...


Quiero dormir....
Quiero soñar...
Quiero descansar...

Quiero despertarme con otra vida...

Sobreviviré...

La ansiedad no siempre es mala.

Es una emoción común, junto con el miedo, la ira, tristeza o felicidad, y tiene una función muy importante relacionada con la supervivencia...


Sobrevivir...
¿Cómo puedo sobrevivir?
¿Qué puedo hacer para aferrarme a esta vida a la que ya no le quedan ganas de vivir?

Estoy ebrio de tanta nostalgia...
Ebrio de olvido...
Por las mismas heridas por las que cayó mi corazón.

No te soporto Soledad...
No te aguanto ni una noche más.

Es este olvido el que mata, el que me deja sin nada...

No me quedan risas para dar, no puedo volver a aprender a ilusionarme.
La vida me esta dando la espalda... y como duele...

Tengo que escribir de nuevo el guión de mi vida, deshaciéndome de todo aquello que no puedo permitirme.
Tengo que borrar todas esas cosas que sobran en mi presente... sin deshacerme del pasado.
Tengo que sobrevivir...

Y lo intento.
La familia, los bancos y aquellos sentimientos con los que nací no me van a detener.

Si quieren mi dinero lo daré, aunque las telarañas en mis bolsillos suelen ser más comunes.
Pero nunca entregaré mi alma.

Seguiré siendo yo aunque me cueste la vida.


No puedo negar que ando perdido.
No se como actuar, ni como levantarme al día siguiente... Pues cualquier día abriré el armario y no tendré sonrisa que ponerme...
Se van gastando de tanto lavarse con lejía...
Y aquella personalidad que solía vestir... se destiñó con un lavado a color.
No se donde encontré esta mirada perdida que se ha colado en mis cajones, y cada día me viste apagándome el corazón.
Y es que hace tiempo que ha dejado de vivir, mi corazón que ya no sabe donde huir...

Debo sobrevivir...

Absurdo silencio

No se si darme la bienvenida o echarme de aquí a patadas....

No me he olvidado de este lugar, aunque parezca todo lo contrario.

Al revés, he echado de menos mucho hablar conmigo mismo.


Se que tal vez suene a excusa, pero tengo mis motivos por haberme ausentado todo este tiempo.
Me despedí en la última página abriéndole las puertas a una primavera ansiosa por llegar, sepultando un invierno que supuestamente había dejado atrás.
Pero la realidad es otra muy distinta, el invierno se ha apoderado de mí... Me ha marcado tanto que no consigo dejarlo en su estación. Me persigue, y me perseguirá durante algún tiempo más.
No se cuando saldrá el sol en mi estación...

Decía que mi ausencia tiene sus motivos, y es que durante todo este mes no he querido abrir mis sentimientos a nadie mas que a mí mismo...

Mis palabras han llegado a muchos corazones. Han llegado a personas demasiado importantes para mí, arrastrándolas a compartir el dolor conmigo...
Y no quiero eso.
No quiero que la gente que me rodea sufra con mi dolor.
Con el dolor que yo mismo me he causado.


Al mismo tiempo he necesitado volver a plasmar mis pensamientos en este diario cibernético.
No puedo arropar mi dolor con el silencio, tenía que sellarlo en estas páginas de consuelo...
Es más, debía plasmarlo o el silencio acabaría mostrándome nuevamente el camino hacia la locura que hace una semana busqué, y gracias a este destino que me ata a la vida, no logré encontrar.
No voy a entrar en detalles sobre lo que ocurrió, porque ya no tendría trascendencia alguna... Y creo que he aprendido la lección.

La vida es luchar.
Ahogarse en el absurdo silencio no conlleva a nada bueno.

Dejando atrás

El invierno esta tocando su fin, y con él se van muchas frías noches de soledad...

El frió se va, la soledad aún perdurara no se cuanto tiempo más.

Ya no le temo tanto como lo hacía meses atrás, pues dicen que lo que no mata, fuerza te da.

De este duro invierno he aprendido muchas cosas, sobre todo y gracias a algunos de esos ángeles que me rodean, he aprendido a quererme un poco más.
Por mucho que la vida se empeñe en hacerme creer lo contrario.

Ya no quiero volver a hundirme, ahora quiero creer en mí.
Quiero perdonarme, y de hecho creo... que ya lo conseguí, pues desde hace varias semanas sonrió con frecuencia y vuelvo a hacer el tonto de esa forma tan ridícula que solo yo se hacer.

Pienso en todo el frió que he pasado. Visualizo mis temblorosas manos escribiendo fluidas palabras que salían desde muy hondo, en este mismo lugar...
Rellenando huecos que de una forma u otra se habían quedado vacíos...

La pena sigue estando dentro de mí, pero ya me voy acostumbrado a convivir con ella.
Da igual lo que haga o deje de hacer, siempre hay quien te recuerda lo desgraciado que eres por vivir de esta manera, o por haber tropezado tantas veces en la misma piedra...
La vida es así, y con esa etiqueta tengo que aprender a vivir.

Los malos ratos siempre llegan sin que te los esperes... No hay que sentarse a esperarlos.
Lo que nunca pude esperar es que mi propia familia me diera la espalda de la forma en que me la están dando.
Bueno..., miento. Siempre supe que me darían la espalda en el momento que supiesen la verdad... Pero... lo peor de todo es que aún no saben nada. O eso creo...
Me atacan de la forma más vagabunda que se puede atacar... Robándome la herencia que nisiquiera ellos tienen aún.
Se agarran a propiedades familiares como si solo sus nombres tuviesen, apartándome de ellas como si de una pelea de perros por un hueso se tratase...
Coibiéndome de mis derechos con sucias amenazas callejeras...

¿Y que puedo hacer yo? Intentan robarme lo que es mío también...
Nunca hubiese podido imaginar que las cosas tomaran este rumbo...

No voy a hacer nada. Voy a esperar.
Voy a esperar a que el tiempo ponga a cada uno en su lugar.

Lo que es mío, lo llevo en la sangre. Nadie puede quitármela.
Mi madre me la dió el día que nací.

También voy comprendiendo porqué ella ya no está aquí... Porque si viera estas cosas...

Estas cosas me hunden bastante, pero ya no quiero volver de nuevo al invierno.
La primavera se acerca, y quiero engancharme a ella.
Vivir el día a día, con sus más y sus menos, como siempre he sabido hacer.
Sin que nada ni nadie me ahogue en el frió que ya estoy dejando atrás...

Me gustaría compartir lo que siento con unos acordes muy especiales... Se trata de un tema que me hace vibrar por dentro, sobre todo a partir del minuto 3.
Ese silencio roto se hizo para mí...
Mis sentimientos se identifican bastante con esta canción: