viernes, octubre 3

Apariencia maquillada


Que puedo hacer, llueve por dentro.


El corazón duele y se deshace...


Hacia tiempo que no sentía el estómago encogido y las manos tan heladas...


Mis pies caminan hacia un nuevo día, pero mi alma retrocede buscando el hogar que ya no existe.


Siempre se me ha hecho difícil poner en concordancia la cabeza y el corazón, pero esta vez... Esta vez no logro encauzar a ninguno de los dos. Solo puedo controlar una idea amaestrada por los dos años que llevo esperando este momento... Pero... es tan difícil llegar a la meta.

Cuanto más cerca estoy de ella, más quiero volver a la linea de salida.


Tengo mucho miedo. Tengo pánico a sufrir.


Me repito segundo tras segundo que debe ser así, e intento distraer mi mente con pasajes diferentes a la ansiedad que tortura mi presente.

¿Cuándo va a llegar el futuro?

¿Cuándo se apagará la llama que arde en mi interior quemándolo todo?

El verdadero dolor acaba de instalarse en mi vida.

No puedo soportar su ausencia.


Se que no estoy solo en esto. Las voces de mucha gente me susurran el animo y el valor... aunque no logro encontrar la fuerza que hoy necesito. El apoyo que me brindan no es suficiente para volver a nacer.

Eres joven, tienes toda la vida por delante, lucha por tu felicidad, lo pasarás mal ahora pero el día de mañana te alegrarás... Frases que se repiten una y otra vez en mi cabeza. Pero... ¿como puedo levantar la ilusión que este dolor empuja hacia el infierno?


Hoy he maquillado la apariencia con sonrisas disfrazadas, mañana volveré a hacerlo. Todos y cada uno de los días que lleguen inventaré canciones para seguir caminando...

Canciones que me hagan alzar el vuelo, para no caer en el llanto que me llama, en la furia desbocada que me incita a derrumbarme.

Porque no respiro sin pensar en ellas, porque no puedo imaginar que la vida nos separa para siempre, aunque estemos siempre unidos.

Se que no las pierdo, pero se que me perderé muchas cosas. Y lo hago por mí, aunque duela.

También lo hago por ellas, aunque les duela...


No me hago a la idea de lo que pasará mañana, solo se que no deberíamos alargar más lo que tarde o temprano llegará. Porque si no es hoy,... será mañana. Si no hubiese ocurrido así, otra historia se hubiese inmiscuido en nuestras vidas para guiarlas por el cauce correcto...

Pero... ¿qué es lo correcto? ¿Lo que dicta el corazón? O... ¿lo que enseña la vida?

Ya no se si escogí el camino correcto.

Que la vida me perdone si me equivoco.


Un fallo más sería mi tumba.




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