sábado, enero 24

Buscandome



No se si será este invierno o los que llevo colgados en la espalda, que ya no pienso ni soy como antes.




No se si será el viento, que se lleva mis sentidos y sentimientos hacia donde valla él... El viento... que se lo lleva todo sin preguntar siquiera si quieres seguirlo.




No se si será este enero el que responde por mi con apabullantes silbidos de tormenta y frías heladas nocturnas...








No se que habrá sido de mí, que ya no consigo encontrarme.








Me he perdido. Y no se cuando ni donde.








¿Alguien me ha visto? ¿Alguien me ve...?








Necesito recuperarme. Quiero encontrarme y no se donde estoy.








Si al menos pudiera llorar este desasosiego que siento... Quizá me sintiera mejor... Al menos podría seguirme el rastro y preguntarme el porqué de mis lágrimas.




Porque me pregunto, pero no logro hallar la respuesta que necesito.








Y me siento mal, me siento contaminado.




Siento que cada paso que doy es el equivocado.




Y los días que no camino también me siento mal, quizá por el camino que anduve sin pensar..., quizá por las horas que desperdicié pensando en como hacerlo todo bien.








Me siento cansado, creo que el día tiene demasiadas horas para mí.




Antes le faltaban, pero ahora son infinitamente demasiadas...








Necesito vivir deprisa...








Anhelo vivir como antes, y echo de menos la ausencia de una vida pasada.




Pero los fines de semana, la aborrezco...




No puedo soportar la dejadez y la absoluta perrera que llena mi hogar.




Llego a la conclusión de que echo en falta las cosas que no tengo y una vez tuve... Pero tenerlas de nuevo me mata.








Y no puedo ser yo quien haga que las cosas cambien... No soy yo la persona que encuentra las fuerzas apropiadas para indicarle a nadie el camino que se debe seguir... Pues ni el mío logro encontrar... O quizá mi subconsciente no me deja buscar.








También echo de menos divertirme, y reír.




Hace mucho tiempo que no lo hago, y recuerdo cuando lo hacía con una leve sonrisa en los labios...




Duele recordar lo inocentemente feliz que era.












A veces pienso en mi diario desastre, y creo que confundí el verdadero nombre de éste... Creo que diario deprimido debería haberlo llamado... Pero ser sincero no es decir todo lo que se piensa, sino no decir nunca lo contrario de lo que se piensa...








Como deseo ver la luz..., como deseo ver que todo se encauza en mi vida.








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